Recuerdo los viajes en la
Vespa 160
azul cielo de mi padre, yo siempre estaba subido en ella
cuando estaba aparcada en la puerta de casa. Me
encantaba esa moto.
En el barrio; en una casa en ruinas había una vieja
Guzzi 65;
aquella que llevaba el cambio en el deposito,
destartalada y con las ruedas roídas por el tiempo; yo
viajaba en ella con mi imaginación hasta los lugares mas
lejanos de la Tierra.
Aquella
Gimson Elitte
que nunca éramos capaces de arrancar a patada, tocaba
empujar, empujar y empujar; aunque cuando conseguíamos
arrancarla merecía la pena tan sudoroso esfuerzo.
La
Vespino
que tantos pasos me quitó y con la que disfruté hasta
rabiar.
Apasionado de las motos; cualquier cosa con dos ruedas
que hiciese ruido llamaba mi atención, pero eso ya es
historia....... |